Un 401 (k) y una IRA tienen diferentes contribuciones máximas, así como diferentes beneficios fiscales. Sin embargo, la diferencia más significativa entre los dos es que un 401 (k) es un tipo de cuenta de jubilación patrocinada por el empleador. Si su empleador ofrece un plan de jubilación 401 (k), sus contribuciones a esta cuenta se deducirán de su cheque de pago. Su empleador también contribuirá a la cuenta.
Un IRA, por otro lado, es más autónomo. No necesita tener un empleador que patrocine este tipo de cuenta para configurar una. Usted mismo configura la cuenta y decide cuándo retirar los fondos. Si tiene un empleador, sus contribuciones se deducirán de su cheque de pago. Su empleador también tiene la opción de contribuir a la cuenta.